Bueno, hace rato que no les cuento nada. Demasiado quizás. Sí sí, no hago terapia, al contrario... YO atiendo a vari@s que me dejan la cabeza asíííí, por lo que al preguntarme "y vos que tal?" me sale el auténtico, el único: "y... ahí andamos" de paso cansino y desganado.Ah, por supuesto: casi que lo prefieren!
Que qué?
Que esperaba un tanto de solidaridad de su parte? Que soy merecedor de un mínimo (pero MINIMO) pago aunque sea en especies (léase, poner el ojo en el chat o la oreja en charlas por tel o similar) ?
Fíjese que sí, pero ell@s no piensan lo mismo. O quizás su altísima necesidad de explayarse al mejor estilo tanguero o "el mundo contra mí" las lleva a explotar vs. el UNICO tipo capaz de dedicarle/s a ell@/s algo parecido a interés: YO.
No, no es ego. Ni se me pasa por la sesera enorgullecerme de esta triste realidad que me agobia cual lluvia torrencial cayéndome a baldazos sobre el rostro... sí, estoy viendo la goteada por la ventana pensando que voy a salir en un rato y no tengo paragüas a mano. En qué estábamos? Ah! lo de los baldazos... bueno, decía que no siento para nada el pecho henchido cual gallo del gallinero de tamaña confianza por parte de mis pseudo pacientes.
Ah, que le parece provechosa la situación? Que usted haría... ñiñiñiñi ?
OL-vídelo. NO. Ni por casualidad. Y sabe por qué? Porque siempre el que la pasa mejor es el que se porta mal y no da (les) pelota. Piénselo. Ud. tiene una amig@, no? Bueno. So, a cada rato le cae con frases al estilo de "este/a desgraciado/a me hizo
blablablabla y yo
blablablabla... no pude más que llorar y decirle de todo pero igual
sarasa, que no l@ quiero ver más,
etc etc etc". Bien, va captando la idea. Eeeentonces cae un@ (osea YO) que le viene con "la oreja comprensiva y gratis" (ESO, no se olvide que no le pagan ni con
"Criollitas"), se rebana las neuronas y le dice "bueeeeeno, vos fijate... quizás
blablablablabla" y luego de esta parloteada a lo loro dando las mil y una razones posibles (o, en el mejor de los casos, bancarse como un lord inglés unas... 3 horas de monólogo) se secan los mocos con la manga (o un pañuelo que VOS le prestaste porque obviamente no tenía ninguno) y te dicen "vos sí que sos un AMIGO de verdad, te voy a hacer caso etc"... y te cortan. Ahá... dos puntos a considerar: A-MI-GO...y que te corten.
Si uno tuvo la suerte (o desgracia) de caer en esa categoría (A-MI-GO) para bien o mal no va a pasar de ahí. NUNCA. Lo que trae dos cuestiones:
1)Si solamente quiere amistad con este ser que le llenó el cerebro genial, porque sabe que aunque en algún momento se peleen MAL siempre se vuelve (o casi) con toda la onda posible -si lo sabré-.
2)Ahora, si la intención era ir de a poco... caput. No. Ni a gancho. Olvídelo. Pasa a ser la peor basura del mundo (en caso de intentar cambiar la "situación") o será SIEMPRE ignorado.... a menos que se mande y le pasa lo que dije recién -si lo sabré... también-.
Sobre lo de que "te corten" no es por mala voluntad ni nada por el estilo (o eso creo yo), sino por el simple hecho que ya dijeron lo que tenían que decir y ahora tienen la cabeza maquinando "cómo le van a decir a fulan@" lo que uno le sugirió. Recuerdan lo de la
"caja de la nada"? Bueno, eso. JAMAS van a tener un mínimo de espacio para que usted le llene CON SUS COSAS aunque sea un mm cuadrado de su materia gris.Bueeeno, tampoco tanto. Quizás justo tuvo ese milagro en que "no le pasó NADA" (TROMPETAS CELESTIALES, SONAD!!!) y te dedica un tiempo prudencial. Nunca mucho, eso está claro. Quizás la culpa la tengamos nosotros (oh, género masculino, escuchad mis palabras! Mis palabras, mis palabras... callate salame! -Les Luthiers dixit-) en que tendemos a resumir situaciones larguísimas... en tres renglones.
No, estimados, NO! Que no aprendimos nada??? Hay que devolver un poco la misma moneda!!!! Es más, si les salen con "che, mirá que no tengo mucho tiempo..." tenemos que decirles "pero yo a vos...." con un tono prudencial, cauteloso y (tachán tachán) NO ECHAR EN CARA. Es lo peor que se puede hacer después de "mandarse" -si lo sabré también... también-. Consejo: en todo caso ignorar olímpicamente esa advertencia "como quien no quiere la cosa", empezar la anécdota en tono medianamente jocoso y de a poco ir largando lo embuchado. Lo importante es que se enganche, no espantarla o que huela a 20000 km que la cosa va para largo.
Y ahora qué le pasa? Que qué iba a contar de mi vida?
"Y... ahí andamos."