Emmm... no taaaaan así. Quizás más parecido a...
Pero hay un pequeño problema... ya casi no queda pelo para usarlo!
Por tanto, me quedan tres opciones :
1) Guardarlo y que quede en el botiquín con la esperanza de que en algún momento lo podré usar, cual Homero Simpson.
2) Guardarlo y cuando sepa que alguien lo necesita prestarlo. Total, ya no falta mucho para parecerme al pelado más famoso de la city porteña.
3)
MmMmMmMm... |
2 comentarios:
Nahhh vos bancate la pelada, ya fue, y dejá el peine por ahí, en el baño, que capaz algún día va visita con pelo que se quiere peinar.
Vos decís? Mirá que uno es de esos que siempre miran el espejo a ver si de alguna raíz empieza a asomar algo... jajajajajajaaja
Aunque no debería tener esos miedos por genética familiar, peeero no me molestaría tener bastante más pelo :-P
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