martes, 16 de octubre de 2012

Un tanto de retórica (He dicho XXVII)

En la respuesta estará la respuesta...

pero para que haya una respuesta tiene que existir por lo menos una pregunta.

Y mientras tanto...



...qué?

4 comentarios:

Yoni Bigud dijo...

Sí, pero tenga en cuenta que cuando la pregunta es estúpida, provoca una respuesta estúpida.

Un saludo.

Gabriel I. dijo...

Usted dice, Don Bigud? Yo diría miti/miti, ya que la pregunta puede ser lo más absurdamente estúpida e irracional posible, pero el interlocutor puede elegir si lo que responde sea acorde al nivel/temática del cuestionamiento o no. No siempre la misma pregunta conlleva la misma respuesta o viceversa... salvo cuando se llama equivocadamente a un mismo número telefónico equivocadamente y se espera que sea correcta la segunda vez. Un saludo!

Lunática dijo...

Respondete y preguntate vos mismo, así encontrarás en la respuesta...la respuesta. Eh...

Gabriel I. dijo...

El tema de eso es que si me pregunto a mí mismo ya voy a saber la respuesta por anticipado, así que no veo mucho sentido... salvo que tenga cierta bipolaridad al estido Harvey Dent o Gollum.
Con respecto a otros reconozco que, si bien soy bastante perceptivo y saco la ficha muchas veces casi sin hablar, de vez en cuando una pregunta cada tanto no viene mal como para corroborar, pues puede que esté metiendo la pata mal y suponiendo algo que nada que ver.